Aplicaciones del Internet of Things (IoT)
29 Ago , 18

En los próximos años se espera superar la cifra de los 28.000 millones de dispositivos conectados en el mundo. Y las previsiones sitúan al Internet de las Cosas como una de las tecnologías punteras con mayor potencial del mercado. Su convergencia con otras tecnologías emergentes como la Inteligencia Artificial o la Realidad Aumentada provocan cambios significativos en el consumidor tanto en su ámbito personal como laboral. Aunque su espectro es muy amplio, como usuarios particulares los dispositivos interconectados nos facilitan la consecución de actividades rutinarias y como entidades empresariales nos sumergen en un proceso de transformación digital sin precedentes. Analizamos algunas de las aplicaciones reales del Internet de las Cosas: de los wearables a las smart cities. ¿Cómo cambiará esta tecnología nuestro presente y futuro?

Wearables, dispositivos a nuestro alcance

La tecnología wearable se refiere a aquellos objetos que usamos en nuestro día a día como complementos y que son un claro ejemplo del Internet de las Cosas. Actualmente, los dispositivos electrónicos más innovadores nos permiten interactuar con el entorno. Gafas, auriculares, relojes o pulseras inteligentes son complementos que nos facilitan la automatización de actividades rutinarias. Además, con esta tecnología accedemos a datos particulares relativos, entre otros aspectos, a nuestra salud o actividad física. Algunos de estos dispositivos wearables nos permiten también interactuar con el entorno a través de la realidad aumentada. Las últimas incorporaciones del mercado han revolucionado el sector: máscaras impresas en 3D que miden nuestras emociones, sensores portátiles para plantas que analizan el uso del agua en los cultivos o hasta dispositivos para comprobar los sentimientos de nuestra mascota.

Smart home

El hecho de convertir una casa en inteligente es, casi sin un atisbo de duda, la aplicación del Internet de las Cosas más popular en estos momentos. Después de los wearables, una smart home es la tecnología más accesible y asequible para los usuarios. Combina innovadores sistemas como, entre otros muchos, el geofencing, que consiste en la geolocalización de un área concreta de la casa, o el August Smart Lock, una cerradura inteligente que te avisa en cada momento de quién cruza la puerta de tu hogar. En este aspecto, el Internet de las Cosas se pone totalmente a nuestro servicio y no al revés, como implica la aplicación de otras tecnologías.

Retail, uno de los sectores más beneficiados

Aunque otros campos profesionales como la industria o la agricultura también se ven favorecidos por las aplicaciones del IoT, el retail es uno de los sectores que más beneficios obtiene. Esta tecnología permite llevar a cabo un control de la cadena de suministro y un trazado de seguimiento de los productos. También favorece el proceso de pagos realizados a través de la tecnología NFC (Near Field Communication) y la gestión automática de compra y venta de productos inteligentes.

Smart cities

Traducidas al español como ciudades inteligentes, las smart cities hacen referencia a un modelo de desarrollo urbano basado fundamentalmente en la sostenibilidad. Esta última aplicación del IoT que analizamos es probablemente la que marque un antes y un después en nuestro modelo de vida. Esta tecnología presenta potencial suficiente para transformar nuestras ciudades, pero ¿hasta qué punto? Gracias a las infraestructuras eficientes implantadas en las smart cities y al uso de sensores y sistemas desarrollados, podemos resolver problemas que afectan a nuestro día a día como la congestión del tráfico, la subida de los niveles de contaminación o la presencia de la delincuencia. La seguridad y la eficiencia energética son dos fines claros de la evolución de las smart cities.

Obviamente, las aplicaciones del Internet de las Cosas no se limitan a las citadas en este artículo. Otros sectores como el de salud o transporte también ven influenciados sus procesos de gestión con esta tecnología. Al igual que empresas o consumidores de cualquier ámbito. En ZELENZA nos dirigimos a nuestros clientes para optimizar sus procesos de transformación digital con servicios gestionados TIC y BPO. La sistematización y automatización de actividades es uno de los principales fines de nuestras acciones desarrolladas.

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